Las alergias en Odontología generalmente constituyen reacciones de hipersensibilidad retardada a materiales dentales.

Aunque se ha considerado que las verdaderas alergias a materiales dentales son raras, en la actualidad estas reacciones alérgicas van en aumento. Existe, incluso, gran cantidad de literatura que demuestra que ciertos materiales las producen y manifiestan sus signos y síntomas en la mucosa y piel, tanto de los pacientes como del personal clínico. Sin embargo, no se puede eliminar el uso de los materiales, ya que estos casos no son generalizados.

El tipo de reacción alérgica en Odontología se presenta como una lesión en piel o mucosa en un sitio localizado, después del contacto con el material (alergeno).

La capacidad para producir la sensibilidad por contacto, se produce por la simple unión entre el alergeno químico (material) y las proteínas, especialmente las de la epidermis y mucosa oral, y no tiene porque estar asociados a anticuerpos circulantes.

TIPOS DE HIPERSENSIBILIDAD ALÉRGICA:

Se da en piel. Existe un período de latencia, de por lo menos cinco días entre el primer contacto con el alergeno y la capacidad de reaccionar en el sitio o a distancia del contacto.

La dermatitis de contacto se manifiesta por sensación de quemazón y picazón en el sitio contacto, seguido por la aparición de eritema y vesículas, las cuales se rompen, y aquí la erosión puede ser mas extensa y ser susceptible de una infección secundaria.

Las manifestaciones orales se conocen como estomatitis de contacto (o estomatitis Veneata). Presenta inflamación y edema de la mucosa acompañada de una severa sensación de quemazón, vesícula que evolucionan a úlceras, eritemas, edemas y pápulas se presentan en las reacciones mas severas, así como también ampollas exudativas.

La estomatitis puede ser menos frecuente que la dermatitis. Esto se puede explicar por la lubricación, digestión y acción de limpieza de la saliva.

Factores protectores: 

Los métodos para el tratamiento de las alergias incluyen un manejo sintomático, desensibilziación y eliminación del contacto con el factor alergénico.

Lo importante no es hacer tratamiento, sino prevenir la aparición de estas manifestaciones, que como ya está claro, se da por contacto y no por anticuerpos circulantes.

Por lo tanto, se recomienda para el personal clínico y auxiliar, el uso de guantes durante el dispensado y manipulación de los materiales, disminuyendo así el contacto con el posible alergeno. Y, a nivel oral, directamente en el paciente, el uso exclusivo de éstos en las superficies dentarias, y en la medida de lo posible, utilizar siempre aislamiento absoluto, y proporcionarlos en la cantidad adecuada sin derramamientos. En los casos en que el material tenga que estar en contacto directo con los tejidos orales (lengua, carrillos, etc) se debe tener la precaución de observar los tejidos para verificar que están completamente sanos y libres de laceraciones.

Otro elemento importante, es hacer una concienzuda anamnesis a los pacientes acerca de la hipersensibilidad a materiales dentales, procedimientos dentales e incluso a metales, y eczemas seguidos, por ejemplo, al uso de joyas, como parte esencial de la historia clínica.

DERMATITIS DE CONTACTO CAUSADA POR PRIMERS DENTALES:

Los signos y síntomas más frecuentes que se presentan cuando la piel entra en contacto con estas substancias son: el color, eritema, inflamación y prurito; en los casos más graves y avanzados se presentan también trastornos gastrointestinales como diarrea y náuseas. Ya existen casos reportados como enfermedad profesional.

Pero, el mayor factor de riesgo que involucra este tipo de reacción se da porque no necesariamente se tiene que estar en contactos directos con la substancia, o tener el antecedente de hipersensibilidad, sino porque los guantes de látex son permeables a estas soluciones y los dedos del odontólogo en contacto con ella.

A esto se suma otro factor agravante: que generalmente, el profesional, personal auxiliar y estudiantes, con mucha frecuencia, se lavan las manos con jabones detergentes o antisépticos lo que origina resequedad de la piel. Además, las grietas en las manos favorecen este proceso.

A nivel del paciente, la principal causa se presenta por derramar líquido en exceso directamente en mucosa o a veces en labios y piel perioral, y porque no se tiene la precaución de aplicarlo ligeramente en la superficie que se requiere y al secar agresivamente el aire desplaza la substancia, ya sea al mismo paciente o incluso al odontólogo.

El manejo, más adecuado para disminuir, e incluso, evitar por completo este riesgo, está en la manipulación de la estricta cantidad requerida para el procedimiento. Cualquier exceso que obligue el contacto con la piel o mucosa puede originar la dermatitis, aclarando también, que el uso de guantes y aislamiento no son total garantía, porque ellos son permeables a estas substancias, que en su composición son ácidos y tienen elementos volátiles.

IMPLICACIONES DE LA DERMATITIS DE LAS MANOS PARA EL PERSONAL DENTAL

La dermatitis en manos es reconocida como una enfermedad ocupacional en los odontólogos, personal auxiliar y estudiantes, quienes se encuentran en alto riesgo

ALERGIA A GUANTES DE LATEX

Las personas con dermatitis son particularmente vulnerables al desarrollo de reacciones alérgicas por el roce con el látex.

La alergia al látex es una reacción tipo I mediado por Ige, que se presenta con un prurito y rubor, hinchazón por contacto local directo, y en casos avanzados graves y a distancia, puede presentar edema facial, conjuntivitis, desmayos y shock anafiláctico, y otras manifestaciones atípicas.

También se puede presentar en pacientes que continuamente están en contacto con látex por frecuentes cirugías.

Factores protectores: Se pueden tomar medidas que permitan conocer el riesgo haciendo una exhaustiva historia clínica al personal que quiera ingresar a trabajar en el área, sobre antecedentes personales y familiares de alergias para saber si tiene la predisposición al desarrollo de éstas.

Se debe enseñar a las personas involucradas el completo conocimiento de las dermatitis, y reconocimiento de las dermatitis, y recomendar una excelente desinfección de manos, guantes que no sean específicamente de látex e incluso impedir el contacto del guante con la piel mediante otro material (guante de tela).

ALERGIAS A RESINAS

Las restauraciones con resinas (acrílicas y resinas compuestas) pueden desencadenar reacciones alérgicas en la mucosa oral, con características definidas, por ejemplo, se puede hablar de estomatitis protésica por contacto, cuando una sintomatología dolorosa de los tejidos en contacto con el alergeno se presenta, observándose el área roja brillante e hiperémica y edematosa, con sensación de ardor, prurito y alteración del gusto.

Algunos casos, pueden no ser tan severos y sólo por un corto período después de la inserción de la prótesis. Estos casos se pueden presentar por el monómero de la resina que no es sometido a altas temperaturas para su endurecimiento, y también cuando polimerizándose bajo calor no se hace la técnica adecuada, y que dan radicales libres del monómero produciéndose una reacción insuficiente de los radicales del monómero con el polímero, y éstos quedan en contacto con la mucosa bucal.

La resina acrílica en contacto con la flora bucal se vuelve porosa y este componente bacteriano unido a la escasa secreción salival que está recibiendo la prótesis forma una esponja de gérmenes; incluso, puede asociarse también a infección por cándida albicans, cuando hay alteraciones del sistema inmunológico del paciente y sus defensas están disminuidas.

En cuanto las resinas compuestas, la etiología de la reacción alérgica se presenta porque en las resinas activadas por la luz y activadas químicamente se encuentra el formaldehído; cuando hay deficiencias en la polimerización total, esta substancia puede quedar en contacto con los tejidos orales y desencadenar la reacción alérgica.

ALERGIAS A MATERIALES DE IMPRESIÓN

La probabilidad de alergias y reacciones tóxicas a materiales de impresión o a sus componentes es baja, pero existe.

Los materiales de impresión, como los poliéteres, son los que han reportado ser causantes de problemas alérgicos, principalmente por el contacto con la piel de la pasta catalizadora (por su componente de Ester de Sulfuro aromático).

Las precauciones que debe tener el odontólogo o auxiliar consisten en una excelente manipulación para lograr una perfecta combinación de la pasta base catalizadora; y recordar, además, que está comprobado que trazos en la pasta catalizadora con contacto con la mucosa oral o piel es el causante desencadenante de la reacción alérgica en el paciente y en el personal dental, porque durante su preparación la piel de sus manos puede estar expuesta a este contacto. Incluso, se recomienda el uso de guantes para aquellos materiales en que está indicado y que no inhiban su polimerización.

El odontólogo debe estar alerta a cualquier signo que presente el paciente, como ardor, prurito, enrojecimiento de la mucosa, principalmente, y también de otros síntomas ya un poco más severos.

ALERGIAS E HIPERSENSIBILIDAD A PRODUCTOS QUE CONTIENEN EUGENOL

El óxido de zinc y eugenol (eugenolato de Zinc) es uno de los materiales más conocidos que contienen Eugenol. Es muy utilizado como restaurador temporal y en conductos radiculares. Pero, el Eugenol es altamente soluble en medios húmedos (saliva) y, a su vez, se desprende óxido de zinc de la restauración. La saturación del ambiente oral por este producto puede causar citotoxicidad, y se presenta una respuesta inflamatoria de la mucosa, aunque en algunos casos sólo es hipersensibilidad pasajera.

ALERGIAS A METALES

Los metales como Níquel, Cromo, Cobalto y Platino son ampliamente utilizados en Odontología en aleaciones propias para procedimientos de Prostodoncia y aparatos de Ortodoncia, pero pueden ocasionar dermatitis alérgica de contacto, ya que una vez en la boca, en contacto con la mucosa oral, hay evidencias de absorción intraoral.

Algunos metales con los cuales se presentan frecuentemente alergias:

Níquel

Es una causa muy común de dermatitis de contacto alérgica, tanto en el uso odontológico cono a nivel industrial.

A nivel odontológico se utiliza aleación con níquel para puentes fijos y aparatos de Ortodoncia (aleaciones de níquel y cromo).

Se ha comprobado que el níquel produce dermatitis de contacto, mayor que otros metales combinados, así solo sea usado en una pequeñísima cantidad (1.5%). Esto se debe a que la corrosión de las aleaciones con níquel libera níquel que es acumulado en los tejidos adyacentes, aunque esta liberación del metal no es proporcional al contenido del níquel en la aleación.

Las reacciones clínicas que se producen por el níquel incluyen edema de los párpados, inflamación y fisuras de los labios, eczema crónica de mejillas y manos. Además, se pueden producir lesiones en otros sitios como brazos, piernas, cuello y cara. También pueden contaminarse fácilmente las lesiones en las manos por el sudor.

Cuando se presentan estos síntomas, se supone que el paciente tiene una sensibilidad previa al níquel, y que si se utiliza este material en Odontología hay una absorción intraoral del mismo, lo cual produce una exacerbación.

Como ya está comprobado que el níquel produce dermatitis alérgica de contacto en los pacientes, lo ideal, como factor preventivo, es hacerle una adecuada anamnesis al paciente, especialmente aquellos que son alérgicos a joyas que tienen níquel en su constitución y que por lo tanto, van a presentar problemas si se usa cualquier aleación que contenga níquel.

Lo anterior, se presenta principalmente a nivel del paciente, ya que el odontólogo relativamente tiene poco contacto con el metal, pero a nivel industrial también puede ocasionar problemas.

Cromo

A diferencia del níquel este metal no parece ser potencialmente alergénico. Se ha encontrado que puede causar dermatitis de contacto con severa irritación de la piel, a nivel industrial, por exposición al uso de detergentes, blanqueadores, cremas, lociones, rasuradoras, fósforos y catgut chromado.

Sin embargo, no se han encontrado aleaciones, por ejemplo Ag Cr. usadas en joyería que produzcan dermatitis de contacto; pero hay estudios que muestran que en unión con el níquel siempre hay reacciones alérgicas.

A nivel odontológico, entonces, lo ideal es hacer una anamnesis adecuada para determinar antecedentes alérgicos al níquel; cuando se intente usar la aleación níquel-cromo, se debe tener en cuenta que también el cromo puede ser potencialmente alergénico en unión con el níquel.

Cobalto

Es biocompatible en ausencia del níquel y berilio. Estos últimos, industrialmente son muy nocivos; por ejemplo, el berilio es altamente carcinógeno.

Existen historias individuales de alergias en pacientes que reportan alergias aún al oro y platino, a pesar de ser estos metales precioso, e incluso también al mercurio.

Entonces, lo ideal es una anamnesis completa para descartar alergias a metales; también se recomienda, que antes de cementar una estructura metálica en boca se deje ésta provisionalmente para observar algún tipo de reacción alérgica, aun si el paciente no ha manifestado antecedentes.

Las aleaciones de níquel-cromo y cromo-cobalto han permitido la realización de tratamientos odontológicos económicos y con buena calidad, pero siempre en su biocompatibilidad por la presencia en su composición de elementos químicos potencialmente patogénicos.

Además, cuando se habla de posibles reacciones alérgicas a metales preciosos, éstas se pueden presentar, ya que la fluorescencia con rayos X ha detectado la presencia de impurezas, como trazos de hierro, en todas las muestras, y en las aleaciones alternativas se han encontrado trazas de zinc en muestras de aluminio y trazas de níquel en muestras de cobalto.

La presencia de estas impurezas puede ser la causa de la sensibilización de los pacientes.

 

A empezar con fuerza la semana 😉

 

Feliz lunes 🙂