También conocida como enfermedad del sueño, la apnea del sueño puede tener graves efectos sobre la mandíbula y la cavidad bucodental.

 

¿En qué consiste exactamente y cómo se trata la apnea del sueño?

La apnea del sueño afecta con más frecuencia a pacientes mayores de 40 años, con algunas características concretas como sobrepeso, mandíbula pequeño, o bien obstrucciones nasales y alergias. También el historial familiar influye en la apnea del sueño. Se recomienda acudir al médico para un diagnóstico preciso de la apnea del sueño. Por otro lado, un estudio maxilofacial será clave para determinar las causas y tratar el problema de forma eficaz.

Esta complicación afecta a la respiración durante el sueño, que se ve interrumpida. Estas pausas pueden ser totales o bien ralentizan la respiración, y pueden durar entre segundos y minutos. Después de la pausa la respiración vuelve a la normalidad en forma de ronquido, en algunos casos el paciente nota la sensación de atragantarse. Como consecuencia, la calidad del sueño se ve afectada y cada vez es peor. ¿Por qué? Cada vez que la respiración se interrumpe el sueño pasa de ser profundo a liviano, lo que provoca que el descanso sea de muy mala calidad.

 

Estos son los síntomas de la apnea del sueño:

  • Cansancio durante el día.
  • Somnolencia.
  • Ronquidos y falta de aire.
  • Dolor de cabeza.
  • Dolor mandibular.

 

Cómo tratar la apena del sueño

La enfermedad del sueño es uno de los trastornos del sueño más frecuentes que existen, junto con el insomnio o el sonambulismo. En este caso, la solución puede pasar por un tratamiento odontológico:

  • Ajustar la postura. Algunas posturas como dormir sobre la espalda facilitan este problema. Si la apnea es leve, un cambio de postura puede ser suficiente para eliminar el problema.
  • Aparatos bucales. Existen férulas y dispositivos bucales que sujetan la mandíbula e impiden la mordida por tal de evitar el colapso de la vía respiratoria. En los casos más leves, las férulas bucales evitan los efectos de la apnea.
  • Cirugía. La cirugía en la vía respiratoria superior sólo se recomienda si los anteriores tratamientos no han eliminado los síntomas de la apnea. puede recomendarse cuando otras opciones de tratamiento no han logrado eliminar los síntomas de la apnea.